sábado, 31 de enero de 2009

Principios prácticos de Peritación Caligráfica


1. Es preciso realizar un examen exhaustivo de todos los documentos, aplicando la metodología completa.
La labor del perito calígrafo debe basarse en criterios científicos y en actuaciones rigurosas y sistemáticas. La meticulosidad ha de regir siempre en el ejercicio de la profesión evitando la tentación de obviar o prescindir de una parte del proceso pues, si bien con la experiencia y los estudios adecuados es posible adquirir “ojo grafocrítico” como para apreciar a simple vista elementos significativos, con este método rápido se corre el riesgo de llegar a conclusiones erróneas.
2. Emplearemos un método globalizador de identificación de escrituras.
Hay muchos métodos válidos para la identificación de escrituras, pero también cualquiera de ellos puede ser erróneo. Es preciso conjugar todas las técnicas y saber adaptarlas a cada caso concreto. Métodos como el gramatomórfico, el grafométrico o el geométrico-estructural son insuficientes en sí mismos para abordar todas las necesidades que requiere un completo análisis pericial caligráfico.
3. Evitar los prejuicios y mantener siempre la imparcialidad.
Los peritos calígrafos estamos sometidos a las presiones de las partes del proceso o de los profesionales del Derecho que, en lógica y correcta praxis, pretenden convencernos de la conclusión más favorecedora para sus intereses. Intervengamos por solicitud judicial, a instancia de parte, o privadamente, debemos recordar siempre que somos profesionales imparciales.
4. El informe pericial caligráfico debe ser extenso y pormenorizado.
El informe o dictamen es la demostración de nuestro trabajo y nuestros conocimientos y en él deben estar respondidas todas las posibles preguntas que nos formulen las partes o el juez.
5. Es preciso contar con suficientes documentos para realizar el análisis.
Los documentos analizados deben ser suficientes cuantitativa y cualitativamente, válidos y de uso legal.
6. La metodología no debe ser cerrada.
Aunque utilicemos un esquema estructural metodológico fijo necesario para no olvidar elementos fundamentales, debemos tener suficiente apertura mental como para, sin olvidarnos de este esquema, ramificar nuestro estudio y seguir diferentes vías útiles para cada caso concreto. Es un error ser “cuadriculado” pues estamos ante una ciencia que admite, junto con el orden, una dosis de creatividad.
7. El análisis grafocrítico de textos manuscritos se basa en el principio de presencia o ausencia de similitudes.
Son más importantes las similitudes, o ausencia de las mismas, que las diferencias formales, que pueden estar provocadas por infinitas circunstancias, aún tratándose de textos escritos por el mismo autor en igualdad de condiciones.
8. Concederemos gran importancia al principio de la Idea de Trazado en textos manuscritos.
El perito calígrafo, basándose en pormenorizados análisis grafotécnicos, debe practicar un ejercicio de abstracción e imaginar los gestos que realizó el escritor.
9. La conclusión se basa en criterios interpretativos.
La enorme cantidad de cotejos practicados y el profundo conocimiento de los documentos estudiados, debido a la aplicación de la metodología completa, nos permite alcanzar una conclusión correcta, siguiendo criterios interpretativos, sin necesidad de recurrir a pautas matemático-estadísticas, demasiado simples y con alto grado de error. Las evaluaciones individuales de la comparación de cada uno de los elementos son orientativas, siendo necesario que la conclusión se alcance en virtud del conjunto de análisis en su globalidad, y no de la simple media aritmética de las puntuaciones alcanzadas por cada uno de los subcotejos. El perito, tras extraer los datos procedentes de los estudios grafonómicos, grafométricos y documentoscópicos practicados sobre un documento, y tras cotejarlos, uno por uno, con los equivalentes del escrito con el que lo estamos comparando, debe dejar pasar un tiempo para que los datos sedimenten en su cabeza.

ALONSO BOSCH, Gregorio . "La Prueba Pericial Caligráfica: Metodología Práctica y Fundamento Jurídico-Criminológico". Tesina de Investigación. pp. 17-21. Univ. Complutense. Madrid, 2000.